Nacional se adueñó del clásico potosino

El conjunto de Nacional Potosí fue más efectivo que su rival y terminó llevándose los tres puntos en el clásico potosino que se disputó ayer en el estadio "Víctor Agustín Ugarte".
Leonel Justiniano, a los 56 minutos del compromiso, le dio la segunda victoria del torneo a la banda roja con un remate a media altura que terminó haciendo estéril la volada del paraguayo Henri Lapczyk.
A sabiendas que la victoria era imperiosa para uno u otro plantel, el choque empezó con iniciativa de ambos elencos en procura de romper el cero.
Los minutos pasaban y Real empezó a hacerse dueño del terreno de juego, llevó el balón de un sector a otro e impuso su forma de juego, pero todo este trabajo fue improductivo porque los lilas no lograron romper el cero. Nacional si bien no era protagonista, demostró en la primera jugada de riesgo que sería un rival difícil de derrotar. Rolando Choque, a los siete minutos de juego, generó un desborde por la banda derecha y tras sacarse la marca de los zagueros lilas ensayó un disparo que Lapzcyk terminó echando al tiro de esquina.
Los minutos pasaban, Real y Nacional se asomaban a los pórticos con bastante peligro pero ninguno de ellos se hacía el suficiente daño como para salir airosos de la contienda.
El tiempo transcurriá y pese a tener llegadas con sello de gol, el marcador siguió en blanco al final de la primera etapa.
En el complemento el primero en asomarse con peligro al arco fue Real Potosí con un remate de Darwin Peña que Diego Zamora envió al tiro de esquina. En la escena seguida, la banda roja consiguió inclinar la balanza a su favor.
Héctor Calderón cedió un pase a Leonel Justiniano al borde del área grande este al ver que tenía el espacio y el tiempo suficiente ensayó un disparo a media altura que terminó venciendo la resistencia de Henri Lapzcyk, quien hasta ese momento había tenido más de tres tapadas de mérito en mano a mano con los delanteros de Nacional Potosí.
Este gol fue suficiente para Nacional Potosí que tras el tanto se replegó a su campo de juego esperando ampliar el marcador mediante el contragolpe.
El DT de Real, José Rossi, colocó cuatro hombres en la ofensiva pero al final estos estuvieron con la pólvora mojada y no lograron romper el cerrojo que puso el arquero Diego Zamora que ayer tapó todos los disparos del rival.